Son las 6:27 de la mañana. Llevo dos horas y media despierta. Me han acribillado los mosquitos por donde han querido y me duele todo el cuerpo. Me han picado hasta en un ojo, lo tengo como una pelota y duele mucho. Con las piernas se han cefrado bien, noto un cosquilleo muy raro y se me quedan dormidas. Me parece que estoy despertando alguna reacción alérgica porque esto no es normal. Debo tener 14 picadas en todo el cuerpo. Y lo mejor de todo es que tengo el FOGO puesto, pero mis mosquitos deben estar entrenados por Rambo como mínimo. No dejan de aguijonearme por todas partes. De hecho, en estos momentos los tengo dando vueltas a mi alrededor cual hienas con su presa. ¡Sólo que yo todavía no estoy muerta! Muerta estaré después, en el trabajo, cuando me venga todo el cansancio de golpe. Aaaargh
martes, julio 11, 2006
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1 comentario:
Ya ves. Y ya me dirás tú que sustancia pueden encontrar ahí. Por eso yo digo que el refrán "tienes menos cerebro que un mosquito" no es cierto. Tienen cerebro y lo utilizan para putear a sus pobres víctimas.
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